miércoles, 10 de abril de 2013

Dreams, dreams, dreamy...

Todo el mundo sueña, ¡y yo la primera! Pienso que todos nos alimentamos de sueños, los necesitamos casi tanto como el oxígeno que respiramos. ¡Qué sería de nuestra vida sin una meta? La felicidad más grande que se puede sentir es esa que sentimos cuando cumplimos un sueño... Y yo hace tiempo que deseo cumplir algunos. Deseo poder pasar todos los días de mi vida en un hospital cuidando de pacientes, deseo escribir más de lo que escribo, deseo cambiar mi estilo de vida, deseo volver a ser la de antes, y deseo escaparme cuando me apetezca a París... Hay cosas que siempre llevamos encima aunque no lo sepamos, cosas que sentimos. Yo siempre llevo encima mi amor por París y mi pasión por los hospitales, y esto me empuja a levantarme cada mañana. De alguna manera, adoro las noches... Adoro meterme bajo las sábanas de mi cama y leer, para después cerrar los ojos y sumergirme en esas cosas que solo pasan en mi mente. 

Los sueños están para cumplirlos, y ya va siendo hora de que cumpla alguno. Y ahora, voy a meterme bajo las sábanas, bajo mi mundo paralelo al que vivo cada día, y voy a soñar...


1 comentario:

  1. Y volviste a escribir...
    Que la vida es sueño y los sueños sueños son ..dijo un ''desconocido'' por ahí :)

    ResponderEliminar