La niña de mis ojos

"Creo que jamás me había costado tanto sentarme a escribir algo. Llevo días intentándolo, intentando dedicar unos minutos a escribirte, pero ninguna de las canciones que pongo me parecen lo demasiado bonitas para esto. Al final he optado por una que siempre me ha recordado a ti, Big girls don't cry. Las chicas grandes no lloran... Que estupidez. Tengo tantas cosas que decirte, que por mucho tiempo que tuviera nunca acabaría de decírtelas. ¿Sabes que me he enamorado? Sí, durante tu ausencia he encontrado algo que me llena; los hospitales. Desde que tu no estás, són como mis mejores amigos. Que tontería... sustituirte por edificios. Deberías odiarme por eso. ¡Hazlo! ¡ Ódiame! Tienes todas las razones del mundo para hacerlo. Desaparecí dejándote sola, aguantando el peso de un dolor insufrible. Me perdí tu cambio de los 14 a los 15, un cambio que tu viviste a mi lado cuando lo viví yo. No estuve a tu lado consolándote en tus peores noches, y tampoco te hice reír cuando era lo que necesitabas. Deberían darme el premio a la peor amiga del mundo, y no bromeo. Soy consciente de lo mal que me he portado, y me odio por eso. 





...






Ella me enseña a sonreír por cualquier tontería casi insignificante, hace grande lo que a primera vista parece pequeño, ella me demuestra que puedes sonreír sin ni siquiera necesitar razones. Tiene un corazón que acostumbra a latir con el mío, somos dos niñas que no saben casi nada de la vida pero les gusta aprender y descubrir cosas nuevas una al lado de la otra. Ella nunca me ofrece la mano para levantarme, porque evita que me caiga. Ella es fuego, un fuego tan fuerte que quema, me quema cada vez que sonríe, me quema cada vez que me toca, que me habla o simplemente cada vez que me mira. Me quema de felicidad. Y ninguna agua es suficiente fuerte como para apagarla. Yo no permitiría nunca que nadie soplara y la apagara, porque para eso estoy yo, para mantenerla encendida siempre.


Perfección. La gran mayoría definen esta palabra como algo que no existe. Y debo admitir que yo pensaba lo mismo, hasta que te conocí. Y entonces me di cuenta de que te envidiaba, porque por cada defecto que tenías, eras un poco más perfecta. Conectamos desde el primer minuto, como si todas las estrellas se hubieran puesto de acuerdo esa noche para hacernos la una para la otra. Són tus manías, cada lunar que cubre tu cuerpo, tus gustos, todas las cosas que has abandonado por mi, por hacerme sonreír o por evitar que derrame alguna lágrima. Són todos esos abrazos de 6 segundos, todas las veces que hemos hablado con una sola mirada. Todas las sonrisas que me has llegado a sacar, y todas las que llegarás a sacarme. Eres como mi rutina, eres mucho más que mi mitad, si tú me faltas me falta todo, me falta más de media vida. ¿Como te lo digo sin que suene a obligación? Quédate conmigo siempre.


Quedan poco minutos para cerrar este año lleno de promesas que se quedan sin cumplir, sueños que se quedan sin convertirse en realidad, y besos que acaban por no darse. Y podría escribirle esta parrafada a cualquier otra persona, pero elijo escribirtela a ti. Porque, puede que ya lo hayas notado, pero siempre te elijo a ti por encima de todos y de todo. Y aunque sé que puede que esto no te sorprenda mucho ya que suelo escribirte cosas casi cada día, sé que seguramente lo que voy a decirte a continuación te sorprenda al menos un poco: de todas las personas que han pasado este año por mi vida, de todas las que he conocido o dejado de conocer, puedo asegurar al cien por cien que tú has sido la que más feliz me has echo. En un año me has dado muchísimo más que otros en 14 años. Todo lo que has echo por mi no se me olvida. Cada momento vivido lo guardo en el baúl de los recuerdos, para no olvidarlo jamás. Hasta nuestra pelea más grande, hasta el peor día a tu lado no quiero olvidarlo. Me alimento de tus sonrisas, vivo cada vez que te veo vivir. Y ahora llega un año, que por favor te lo pido, deseo que sea nuestro año. Creo que ya hemos llorado demasiado este año, y quiero encargarme de hacerte llorar siempre que pueda, pero de felicidad. No voy a abandonarte nunca, cada vez tengo más claro que si tu me faltas, yo falto a este mundo. 
¿Sabes que ha sido lo mejor que me ha pasado este año? No, no pienses lo que sé que estás pensando. Eso no ha sido lo mejor. Lo mejor que me ha pasado, ha sido conocerte.
¿Y mi deseo para este año que llega? Que sigamos igual de unidas, o si puede ser, que este año nos una aún más. Solo deseo estar a tu lado, y si te tengo a ti ya no necesito nada más. (31 de Diciembre del 2011)

No necesito a miles de amigos, tú vales mucho más que un millón de personas juntas. Sabes perfectamente que si me faltas tú me falta todo, que tú me llenas cada segundo que tiene el día, que me haces reír cuando la tristeza se apodera de mi, y me dejas llorar cuando todo el mundo me obliga a sonreír. Que a tu lado siento que tengo el mundo bajo mis pies, y sabes mejor que nadie que no necesitas seguir buscando excusas o palabras para hacerme feliz, porque cada vez que sonríes haces que la felicidad se apodere de mi. No necesito más, porque contigo lo tengo todo. Te quiero más de lo que se puede querer a alguien, es algo sobrenatural, algo inhumano. Solo puedo darte las gracias, por todo lo que has echo y todo lo que sé que nunca dejarás de hacer.